El déficit calórico es cuando el cuerpo gasta más calorías de las que ingiere. Es lo básico si queremos reducir o mantener un peso equilibrado del cuerpo, porque no bastará sólo con entrenamiento.
Para llevarlo a cabo, lo primero que debes hacer es estimar las necesidades de energía que tenemos a diario, es decir, cuánto gastas teniendo en cuenta tu metabolismo basal y la actividad física que realizas.
Metabolismo basal = Calorías que tu cuerpo gasta al día.
Actividad física = dependerá de lo que hagas (pesas, correr, rutina de entrenamiento, etc).
Una vez que sepamos cuánto gastamos con esas dos variables, podemos estimar cuanto debemos ingerir para mantener el déficit calórico.
Es importante señalar que para asegurar una pérdida de peso saludable y una ingesta adecuada de nutrientes, las mujeres no deben consumir menos de 1.200 calorías al día y los hombres no menos de 1.500 calorías. Lo más recomendado es consultar este tema con un especialista y partir desde ahí comenzar tu plan. También es importante recordar que no debes dejar de lado las proteínas, fibra, frutas y estar bien hidratrado/a.
Recuerda que puedes lograr un déficit de calorías consumiendo menos calorías o aumentando tus niveles de actividad física, o ambas a la vez.
¿Cómo lo podemos lograr el déficit calórico?
-Aumentar el gasto calórico mediante el ejercicio regular.
-Controlar la ingesta de calorías diarias. ¡Mantén a raya los antojos!
-Estar bien hidratado/a. Beber mucha agua es fundamental para el déficit calórico.
-Descanso adecuado.
